22 de noviembre……………………y entonces sucedió que……………………..
…………………………llamaba poderosamente la atención que no se hubiera presentado a la cita que tenía prevista para realizar los últimos retoques en el maquillaje de la novia, que aquella misma mañana del 11 de noviembre de 1978 contraía nuevas nupcias. No era normal que Rhonda, “siendo tan responsable”, se ausentara, así sin más, sin justificación, de algo que tanto le gustaba y que le proporcionaba unos ingresos extras a su modesto sueldo de camarera, ayudándole a sacar adelante a Donnie, su hijo de cuatro años, y mucho menos que ni tan siquiera hubiera llamado avisando de un posible retraso al aludido compromiso.