QUERIDA KHEIRA: «ODIALLO»

41174 de noviembre………………………………y entonces sucedió que………………….

………han salido a cenar, invitadas por el club, toda la plantilla al completo del equipo de fútbol femenino del Paris Saint Germain, con su cuerpo técnico a la cabeza, el entrenador Didier Ollé Nicolle y sus dos ayudantes Bernard Mendy y Michel Audrain.

Habían previsto celebrarla en uno de los salones privados del coqueto y exclusivo “Le Pavillon de la Grande Cascade”, ubicado en el 1 allee de Longchamb, en el Bois de Boulogne, pero al final se han decantado por el no menos espectacular “Le Chalet des Illes”, situado en la misma zona de la capital parisina.

Vienen de derrotar a domicilio al Dijon por tres goles a cero, en un encuentro celebrado el pasado fin de semana. La idea del club parisino es hacer piña de cara al importante partido de champions del martes de la semana que viene contra el Real Madrid ya que ese fin de semana no hay previsto partido de liga, hasta dentro de diez días, del domingo 14, correspondiente a la octava jornada del campeonato francés que se jugará en casa del siempre peligroso Lyon Féminines, con las que colideran la clasificación, empatadas con los mismos puntos, 21.

Al acabar la cena, Aminata Diallo se ofrece para llevar a casa a Kheira Hamraoui y Sakina Karchaoui. Aminata y Kheira son muy buenas amigas. Hace dos años, tras quedar fuera de la convocatoria de la selección, se marcharon de viaje a México. El año pasado ambas llegaron a coincidir en la liga española, eso sí, como rivales, Diallo en el Atlético de Madrid y Kheira en el FC Barcelona, pero manteniendo, por encima de todo, esa buena amistad.

Dejan primero a Sakina en su domicilio y aunque Kheira, que está muy cerca del suyo, se ofrece para ir andando desde allí, Ami, como buena amiga, no lo acepta, ofreciéndose a llevarla hasta la misma puerta de su casa. Circulan por le rue des Cormiers, en el tranquilo barrio residencial del municipio de Chatou.

Pasan quince minutos de las diez de la noche de un 4 de noviembre, de un día como hoy, de hace un año, de una agradable noche, en la que las dos amigas transitan charlando amistosamente, por aquella calle estrecha, sin apenas tráfico, y sin comercios, en el que solamente a la altura del 48 se encuentra el restaurante “Le Royal” que lleva cerrado desde las diez menos cuarto de la noche. Van muy despacio, disfrutando del momento, hablando de sus cosas.

De pronto aparecen, como salidos de la nada, junto al Toyota Corolla, dos hombres, con sus rostros cubiertos con pasamontañas. Uno se coloca delante del vehículo obligándole a detenerse, el otro, abriendo la puerta donde está sentada Kheira agarrándola de un brazo la saca violentamente del vehículo, comenzado a darle golpes en las piernas con una barra de hierro.

Trata de defenderse como buenamente puede. Amianta bruscamente también es obligada a salir fuera del habitáculo del coche, aunque la peor parte de aquel ataque se lo lleva Kheira.

En mitad de la agresión y mientras la jugadora es golpeada, uno de los asaltantes dice en voz alta una frase que servirá para iniciar las primeras investigaciones, —”esto por andar con hombres casados”—, abandonándolas allí malheridas.

Tras ofrecer los primeros datos a la gendarmería francesa, los investigadores centran su atención en aquella frase que ponía el acento de las pesquisas en la posibilidad de una venganza que tuviera algo que ver con alguna relación de la jugadora extramarital.

Las primeras indagaciones sobre aquel presunto “affaire” se centran en Hayet Kebir, la mujer de Eric Abidal, con quien el ex futbolista tiene cinco hijos, director deportivo del club blaugrana y con quien la jugadora había coincidido durante los tres años que había permanecido en el equipo de la Ciudad Condal y con el que, efectivamente, al parecer había tenido una aventura sentimental.

Pero aunque las sospechas parecían tener su fundamento no hay una sola pista que ponga en relación a la mujer de Eric Abidal con aquel ataque. De hecho, destapado el  asunto en cuestión Hayet Kebir acabaría pidiéndole el divorcio a aquel.

Las sospechas de los investigaciones sin embargo se irán centrando poco a poco en la misma persona, la conductora, amiga y compañera, que seis días más tarde acabaría siendo detenida como presunta inductora de estos hechos, principalmente motivados por una rivalidad directa con la agredida, en una lucha encarnizada por ocupar el mismo puesto (en el centro del campo) tanto en el PSG como en la selección francesa, y por asegurarse con esta agresión la titularidad del próximo partido de champions, resultando aquella además, algo que despertaría de inmediato las dudas de la policía, casi indemne en aquel ataque, con apenas unas rozaduras superficiales.

Un informe demoledor de la policía del distrito de Versalles determinaría que la aludida jugadora, Aminata Diallo, alimentaba un verdadero odio hacia su compañera de equipo considerándola un verdadero obstáculo para el desarrollo de su carrera profesional.

Y aunque ante la falta de pruebas concluyentes acabaría siendo puesta en libertad, diez meses más tarde, la detención de cuatro implicados en aquel turbio asunto, confesando su autoría en el ataque, admitiendo tratarse de un encargo de la jugadora, sería motivo más que suficiente para proceder a su arresto, en su domicilio, de Marly Le Roi (a las afueras de París).

El pasado mes de septiembre, aunque Kheira no entraba en los planes del nuevo técnico Gérard Precheur, la jugadora se ponía a su disposición.

Por su parte a Diallo, la justicia le obliga a residir en Grenoble, localidad en donde vive su progenitor, así como cumplir una serie de medidas cautelares a la espera de juicio, como la de presentarse en comisaría semanalmente y tener prohibido contactar con otras futbolistas del PSG o personal del club.

Veremos cómo acaba este asunto de traición. Ya lo dijo Suzzanne Collins, creadora de la serie “Los juegos del hambre”;

—“Para que exista traición, tiene que haber habido confianza primero”—

Y sin duda, confianza había, y mucha, y por tanto…mucha traición también.

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s